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Cultura

Sábado 19 de diciembre de 2015

Star Wars 7: Despierta la fuerza de la mujer

Ayer se entrenó Star Wars VII: “El despertar de la fuerza”, la séptima película de la franquicia que despierta pasiones en Argentina y el mundo desde 1977.

En esta entrega la protagonista es (¿paradójicamente?) Rey, el personaje interpretado por Daisy Ridley y es la primera mujer en hacer uso de la Fuerza en la historia. ¿Es la prueba de un cambio de épocas? ¿Las minorías están consiguiendo otro lugar o la sociedad siempre será patriarcal? Las respuestas, en una nota con la alerta de spoiler bien encendida.


A partir del lanzamiento del episodio IV: “Una nueva esperanza” los personajes femeninos de Star Wars fueron relegados al lugar de respaldo de silla, y así detrás de cada gran hombre hubo una gran mujer. Mientras la segunda ola del feminismo rompía, en la década del 80, la Princesa Leia acompañaba a Han Solo y Luke Skywalker; pero sin un rol protagónico en ninguna de las victorias de los episodios IV, V y VI. Luego Padmé Amidala buscó un rol político de peso en “La amenaza fantasma” de 1999, pero se diluyó como “la mujer de” a partir del episodio II.


Rey no es “la mujer de” nadie, y junto al avance de la tercera ola feminista reclama un lugar distinto al de la chica de Solo o la reina de Naboo. Rey no besa, Rey maneja el Halcón Milenario de Han Solo, Rey triunfa en el escape de Jakku y fracasa abriendo compuertas en el espacio, Rey es humana. No se relaciona con el personaje masculino (Finn, interpretado por John Boyega) desde su sexualidad, son compañeros en el viaje, en la derrota fuera del bar de Maz Kanata, en la victoria final y hasta en el uso del sable de luz.


Paralelamente, en nuestra galaxia el sociólogo Jeffrey Weeks habló en su libro “Sexo, política y sociedad” de que las sociedades occidentales avanzan hacia una crisis de las estructuras tradicionales de género. Aunque quede mucho camino por recorrer, hombres y mujeres están naturalizados en ámbitos de poder, por lo que la valentía del personaje de Rey trasciende a Star Wars. Es un rasgo de época.


Al ser entrevistada por el New York Times, Ridley dijo que en esta película “las mujeres son tan importantes como los hombres y que estamos viviendo en un tiempo donde, más que nunca, todos tienen voz”. Además aclaró que ser mujer no fue un condicionante extra y que no se la estereotipó o se pidió nada diferente de lo que ella ya es. El guión de la película deja en evidencia el desafío a los esteotipos de género que se le presenta al personaje de Ridley. La sorpresa de Han Solo ante sus conocimientos de mecánica o la ira de Kylo Ren con sus soldados por haber dejado escapar al droide con “una chica” deja implícita la irrelevancia de su condición de género.


¿Acaso los planos donde Rey y Finn aparecen juntos a la par hablen de esta igualdad? Lo cierto es que con un afroamericano, una mujer, un latino y un blanco, como nuevos personajes principales, la película da lugar a todos y cátedra de pluralidad.